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Como Pedir y Que Nos Convenga?



Romanos 8:26-27. “y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues que hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles. Mas el que escudriña los corazones sabe cuál es la intención del Espíritu, porque conforme a la voluntad de Dios intercede por los santos”.

​No lo sabemos, pero. ¿Por qué?

Muchas son las causas:

#1. No somos omniscientes: significa Que no lo sabemos todo , todo solo lo sabe Dios pues ese es uno de sus atributos , por eso cuando pedimos sin tener todas las piezas del rompecabezas en nuestras manos nos guiamos conociendo una parte de la situación o circunstancia y desconociendo otra gran parte que solo la conoce Dios, y pedimos entonces guiados por nuestras realidades ;realidades que casi siempre difieren de las de DIOS y por eso no pedimos como conviene, ni según su voluntad y menos según el Espíritu.

#2. No somos Alfa y omega: significa que no somos el principio ni el fin de nada, de modo que no vemos todo a totalidad, no vemos el pasado y desconocemos el futuro; sim embargo Dios anuncia desde un principio el curso, desarrollo y final de todo según el libro de Isaías. Así que el desconocer esto nos orilla fácilmente a desacertar en nuestra forma de pedirle.

#3. Los pensamientos de Dios no son los nuestros ni sus caminos los nuestros: Entonces aquí otro bache al pedir y párese que no nos ponemos de acuerdo. ejemplo: Dios quiso usar a JOB como un ejemplo digno frente a satanás mencionándole. mira a Job, míralo es recto; temeroso y sobre la tierra nadie como él (esto toco el orgullo d satanás porque siendo el príncipe del mundo estaba dentro d los inferiores a Job). Cuál era la actitud de Job, quería morirse sin saborear la victoria y como este ejemplo; tu yo no diferimos mucho y en cosas menores.

#4. casi siempre oramos hasta que tenemos el agua hasta el cuello: entonces en la desesperación de sentir que nos ahogamos no pedimos como conviene, sino guiados por nuestro espíritu de sobrevivencia que lo único que desea en ese momento es no ahogarse y salir a flote y en esa desesperación lo que menos pasa por nuestra mente es que Dios está trabajando en nosotros para un propósito y. Esas son algunas razones. Pero gloria a Dios por el Espíritu Santo que intercede en nuestra debilidad, y a Cristo que aboga también ante el Padre que bendición. Los amo comenten, compartan y suscríbanse para recibir un devocional diario juntos somos más y podemos hacer más la diferencie buen día familia.

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